Personal de la Dirección de Explosivos la retiró para su posterior destrucción. Fue encontrada en un contenedor de Sarmiento al 2300. También había unas pocas municiones.
Una granada y municiones de distinto calibre fueron arrojadas en una bolsa al interior de un contenedor y debió actuar personal especializado en explosivos para liberar el área del peligro.
El hallazgo se produjo pasado el mediodía en la zona de Sarmiento al 2300 donde un hombre alertó a la policía sobre una bolsa de color blanco en cuyo interior había algunos cartuchos de arma de fuego. También había una cartuchera de cuero cuyo contenido no se podía ver a primera vista y un artefacto similar a una granada.
Los policías se comunicaron con personal de la Dirección de Explosivos y de inmediato se organizó un operativo para manipular aquella bolsa, debido al riesgo supuesto de una detonación no controlada.
Minutos más tarde arribó al lugar una comisión especializada en explosivos y al abrir la bolsa encontró 14 municiones de calibre 7.62 y 3 municiones de calibre 11.25, además de un par más de calibres menores. Todas ellas presentaban una coloración propia del paso del tiempo.
En tanto a un lado de la cartuchera de cuero había una granada de mano, armada, es decir con la espoleta y el resto de las piezas colocadas para su funcionamiento. El modelo era un FMK2 perteneciente al Ejército Argentino que fue extraída en con pinzas especiales y colocada dentro de una esfera de detonación.
Una granada y municiones de distinto calibre fueron arrojadas en una bolsa al interior de un contenedor y debió actuar personal especializado en explosivos para liberar el área del peligro.
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— La Capital MdP (@lacapitalmdq) June 22, 2022
Una vez protegido el artefacto fue trasladado a la base de la Dirección de Explosivos donde se inició el proceso para su destrucción y saber si estaba su carga en condiciones de estallar. Debido a que se trataba de un material “condenado” (pertenecía a una fuerza armada y había perdido su cadena de custodia), se la destruyó.
El resto de las municiones y la cartuchera de cuero fue enviada a la comisaría novena para su decomiso, con intervención de la fiscalía de turno a cargo de María Florencia Salas.